¿Cuál habla del vínculo real?
En astrología de relaciones, las cartas comparativas
son herramientas esenciales para explorar la dinámica entre dos personas. Pero
hay dos métodos que suelen confundirse o usarse indistintamente: la carta
compuesta y la carta Davison. Ambas pretenden describir “la relación
como una entidad en sí misma”, pero lo hacen desde dos filosofías muy
distintas.
¿Cuál de las dos habla realmente del “vínculo real”?
¿Cuál tiene más peso predictivo? ¿Y en qué casos conviene usar una u otra?
Vamos por partes.
Origen y filosofía: ¿cómo nacen estas dos
técnicas?
La Carta Compuesta
Fue popularizada en los años 70 por astrólogos como Robert
Hand y Robert Blaschke, aunque hay indicios de que su uso
experimental comenzó antes, en círculos esotéricos europeos.
¿Qué es?
La carta compuesta se calcula tomando los puntos
medios matemáticos entre los planetas de dos personas. Por ejemplo, si tu Sol
está a 10° de Aries y el de tu pareja a 10° de Leo, el Sol compuesto estará a
10° de Géminis. Así con todos los planetas, ángulos y casas.
Filosofía:
La carta compuesta es un símbolo psicológico del campo energético
compartido entre dos personas. Es una especie de "tercer cuerpo" o
“tercera carta” que nace de la interacción.
La Carta Davison
Propuesta por Ronald C. Davison en los años 70,
esta técnica fue más usada en Europa y en entornos más técnicos de la
astrología inglesa.
¿Qué es?
Se calcula hallando el punto medio real
(astronómico) en el espacio y en el tiempo entre los datos natales de las dos
personas. Es decir, si una nació el 1 de enero de 1980 en París y otra el 1 de
enero de 1990 en Buenos Aires, la carta Davison será la carta astral del
momento exacto intermedio, en tiempo y lugar.
Filosofía:
La carta Davison representa una realidad objetiva: una carta astral real que
podría existir. Es como si la relación naciera en un punto preciso del
espacio-tiempo.
Diferencias técnicas claves
|
Aspecto |
Carta
compuesta |
Carta
Davison |
|
Método |
Promedios
simbólicos de posiciones planetarias |
Carta real
en espacio-tiempo intermedio |
|
Tipo de
carta |
Simbólica |
Astronómica |
|
Casas y
ángulos |
Calculadas
artificialmente |
Reales,
según coordenadas |
|
Precisión en
tránsitos |
Baja
predicción en eventos externos |
Alta
respuesta a tránsitos y atacires |
|
Uso
principal |
Psicología
del vínculo |
Cronología y
destino del vínculo |
¿Cuál habla del “vínculo real”?
Depende de qué entiendas por “vínculo real”:
Si buscas la experiencia
psicológica compartida — el clima emocional y el tipo de conexión, la carta
compuesta es ideal.
Te dice si la relación se vive como una danza de poder
(Plutón en casa 7), una historia romántica (Neptuno en casa 5), o una alianza
práctica (Saturno en casa 6). Es muy útil para entender el por qué emocional y
simbólico de lo que se siente estando juntos.
Úsala si trabajas terapéuticamente o quieres explorar
arquetipos y patrones emocionales.
Si buscas la manifestación concreta
del vínculo en el tiempo — eventos, rupturas, encuentros importantes, hijos,
separaciones, mudanzas — la carta Davison es la que suele responder mejor.
¿Por qué? Porque es una carta con coordenadas
reales. Por eso responde a tránsitos, progresiones y atacires como
cualquier carta natal. Puedes predecir momentos clave de evolución o crisis de
la relación.
Úsala si haces astrología predictiva o quieres saber
“cuándo pasa qué” en la relación.
Ejemplo práctico: una relación con historia
Imaginemos una pareja que lleva 10 años, con altos y
bajos, una separación, una reconciliación y un hijo en común.
- La carta
compuesta puede mostrar una Luna en casa 8 y un Venus conjunción
Plutón: mucha intensidad emocional, dificultad para soltar, un lazo
difícil de cortar incluso cuando se está lejos.
- Pero si
observamos la carta Davison, vemos que Saturno está en casa 5, y
que al momento del nacimiento de su hijo, Plutón transitaba en conjunción
a ese Saturno: una transformación real del modo en que vivían el amor, a
través de la responsabilidad compartida.
¿Se pueden usar las dos? Sí, y con ventaja
Muchos astrólogos experimentados usan ambas como
herramientas complementarias:
- La
compuesta, para leer cómo se sienten juntos, cuál es el clima
psíquico.
- La
Davison, para mirar qué va a pasar, cuándo se fortalecen, cuándo se
tambalean.
Una sugerencia práctica:
- Carta
compuesta + sinastría: para trabajo interno, terapias de pareja, exploración emocional.
- Carta
Davison + tránsitos/atacires: para predicción, planificación, y
comprensión de los ciclos reales de la relación.
¿Cuál es más “real”?
Ambas lo son, pero desde niveles distintos.
- La carta
compuesta es el alma simbólica del vínculo.
- La carta
Davison es el cuerpo astral del vínculo.
Una muestra cómo se sienten juntos, la otra cómo se
manifiestan juntos en el mundo.
Y en una relación viva y compleja… ambas dimensiones
son imprescindibles.
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